martes, abril 26, 2016

Coño, qué frío hace hoy. Nadie en la calle. Qué raro, si es sábado. En fin, debería tener cuidado. Últimamente vuelvo la mayoría de las noches sola a casa. Y con últimamente me refiero a desde hace meses. Oh dios mira, nuestro banco. Bueno, con nuestro me refiero al que solíamos habitar. ¿Habitar? Quiero decir, frecuentar. Y con frecuentar me refiero a tres noches, que tampoco duró más. Joder, miro al cielo. Sonrisa socarrona. Cómo dolía. Cómo coño podía doler tanto. Explícamelo, porque no era nada. No era nada más que un fallo de esos en los que te hundes sin querer. Qué bien se te ve desde lejos. Y con bien, me refiero a mal, a real, a terror, y hablando de terror, a error. Se te ve como una mancha clara pero a la vez no muy nítida, como uno de esos casos sin resolver, ¿sabes? En fin, que solo pasaba por aquí para decirte que estoy jodidamente orgullosa de mí misma. Y que fue muy bonito (y corto), y que lo pasé muy bien, y que me gustabas un montón y que te quería muchísimo y que hubiese dado todo por ti y que bla, bla, bla, bla... Pero que hace frío y no estás. Y con que "no estás", me refiero a que me alegro de que sea así.

0 comentarios :

Publicar un comentario

Siril Blog Template. Con la tecnología de Blogger.

Opt-in Form (Do Not Edit Here)